Queridos feligreses:

¡¡CRISTO HA RESUCITADO!!

La Palabra de Dios proclamada SIEMPRE se cumple en nuestra vida. El evangelio de la Vigilia Pascual de san Marcos es una Luz que nos ayuda.

Las mujeres van al sepulcro a primera hora.

No han podido dormir por la preocupaciónes. Todos tenemos preocupaciones que muchas veces no nos deja vivir.

Decian las mujeres: «¿Quién nos correrá la piedra del sepulcro?». Dios no nos ha creado para la muerte, para las tinieblas, para el sinsentido, SINO para la vida y Vida Eterna.

Dios siempre actúa en nuestro favor porque nos AMA.

Pero al llegar la piedra estaba corrida y entraron.

Vieron a un joven vestido de blanco. El blanco significa la Resurrección. Resucitó al alba.

Ellas se asustaron, pero él dijo: «No tengáis miedo».

Hoy el Señor nos dice: «¡Ánimo! No tengas miedo». En la Resurrección ha sido destruida la muerte física y moral. La muerte física porque nos da la inmortalidad y la muerte moral porque todo el que invoque el nombre del Señor se salvará.

El Señor Jesús, en su cuerpo ha cogido nuestros pecados, nuestros sufrimientos, nuestro YO y los ha destruido en su Rasurrección y la pena que merecen nuestros pecados han caído sobre Él.

Él es nuestra Justificación.

Dios Padre ha resucitado a su hijo Jesús como signo de su Amor, de su presencia y de que Él hace contigo siempre una historia de salvación.

Venimos de Dios, apoyados en Él experimentamos su presencia y su fuerza en nuestra vida y después volvemos a Él.

Con nuestra libertad, apoyados en Jesús, en su Resurrección, destruimos nuestro yo, que quiere ser Dios porque no cree en el Amor de quien lo ha creado.

¡CRISTO HA RESUCITADO! ¡VERDADERAMENTE HA RESUCITADO!

La Resurrección da sentido pleno a la vida y a la muerte.

Juan Antonio